IMPRIME MÁS BARATO

Detrás de cualquier proyecto de imprenta, hay una serie de parámetros o decisiones que determinarán tanto la calidad como el precio del proyecto. Pero en ocasiones puedes cambiar algunos parámetros que no te resultan relevanes, y obtener a cambio un importante descuento en el precio. Por eso para reducir costes de impresión, la clave está en entender qué necesitas, qué aspectos son fundamentales y cuáles no.

Los primeros aspectos que afectarán al coste serán el tamaño y el número de páginas (caso de tenerlas) de tu original. A partir de ahí la cantidad de unidades a imprimir y la urgencia, que determinarán la tecnología de impresión, digital o offset. Luego el soporte: cartón pluma, vinilo, lienzo o papel, y en este caso tipo de papel (satinado, rústico), gramaje (de 80 a 300gr.), etc. A partir de ahí el número de colores y el tipo de tintas. Y finalmente el manipulado: corte, encolado, grapado, plegado, encuadernado…

La Impresión Digital es ideal para tiradas cortas, normalmente hasta 1.000 hojas DINA4, o lo que serían 5.000 tarjetas de visita, 3.000 flyers, o 100 catálogos de 12 páginas. Es muy rápida, puede hacerse al momento, no requiere tiempos de espera. Como no hay costes iniciales (fotolitos, planchas..), se puede imprimir desde 1 sola unidad si se desea. Es perfecta por lo tanto para tiradas de prueba, para hacerte una idea de cómo quedará… El aumento de colores no influye mucho en el precio, al igual que éste no baja demasiado conforme aumentas de cantidad. Se corta a mano en guillotina. La impresión digital no permite pantones, ni tintas metalizadas, ni impresión a sangre y tiene algunas limitaciones en cuanto a medidas y materiales (papel de máximo 200gr, tela sólo de algodón, etc.).

La Impresión Offset está pensada para proyectos grandes, a partir de 2.000 hojas DIN A4, o lo que serían 10.000 tarjetas de visita, 5.000 flyers, o 500 catálogos de 12 páginas. Al ser un proceso mecanizado, hay unos costes iniciales de entrada, pero luego el precio desciende muchísimo conforme aumenta la cantidad de impresiones. Permite máximo control de calidad, así como el uso de pantones y tintas especiales, pero el número de colores afecta al precio. Se corta en máquina con troquel. Requiere tiempo de producción y de secado. No tiene límites en cuanto a materiales.

Una solución intermedia para proyectos grandes pero urgentes, suele ser lanzar Offset, para aprovechar los precios más baratos, pero entre tanto hacer una tirada pequeña en Digital, para poder contar con algunas unidades impresas de forma rápida.

El papel, con su inmensa variedad de tipos, gramajes y acabados, es el material más versátil. Puedes reducir costes reduciendo gramaje del papel o yendo a papeles en stock en lugar de papeles especiales. Conviene usar tamaños standards (norma DIN), para aprovechar el papel aunque, claro está, reducir el tamaño es otra opción para bajar costes. Sin embargo todo tiene un límite: intenta mantener en tarjetas un gramaje de al menos 250gr. y un acabado estucado mate por ejemplo, usa papel fotográfico para posters, etc.

Hay muchos otros materiales como lienzo, vinilo o tela, cada uno con parámetros específicos (trama o número de hilos para tejidos, etc). Y luego están los soportes, para darles rigidez, como cartón pluma, forex, bastidores de madera, marcos, etc.

Las tintas y/o colores son otro aspecto importante. Puedes reducir costes evitando tintas especiales como las metalizadas (oro, plata..), pero si vas a imprimir por ejemplo una lona, cartel o vinilo para exterior, no prescindas de las tintas UVI. Intenta reducir el número de colores si no es algo relevante, por ejemplo pegatinas para paquetería.

Los acabados como estucados o laminados, dan mayor calidad a la impresión y no suelen tener un coste significativo.

Manipulado es todo proceso posterior a la impresión, los básicos son corte (guillotina o troquel), y plegado (trípticos), cuyo coste es muy razonable, A partir de ahí, el encuadernado (wire-o, fresado, etc), el montaje en bastidor (fotocuadros), y sobre todo el encolado (displays), embolsado, colocación de ojales a lonas publicitarias, etc, tienen un coste más significativo que conviene evaluar.

En Barcino te ayudamos a reducir al máximo tus costes de impresión, pero sin que se note.
Por eso nos gusta dedicar tiempo a cada cliente, entender sus prioridades y darle el consejo justo para que sus tarjetas queden perfectas, sin gastar ni un céntimo más de lo necesario. Y es que a veces un buen consejo puede no sólo mejorar la calidad de tus impresiones, sino también reducir su precio: troqueles, tintas, acabados…

Ven a consultarnos, estamos en el corazón de Bcn (zona Eixample).
Una imprenta de confianza, rápida y a buen precio.